MICHAEL STEVEN HENAO QUIERE IMITAR AL “CAPO”
El joven actor, recordado por interpretar a “Bombillo”, el hijo de Fabiola en Hermanitas Calle, es uno de los seis millones de desplazados en Colombia. Por fortuna, en su nuevo hogar halló la esperanza de un mejor futuro.
Cuando Michael Steven Henao y su familia salieron de su pueblo, dos mudas de ropa eran su equipaje. La situación en aquel lugar era insostenible, pues los grupos al margen de la ley “vacunaban” a los habitantes y el dinero no les alcanzaba para los alimentos o el arriendo. Huían de la violencia causada por el conflicto armado, dejando atrás sus pocas pertenencias.
No volvió a ver a sus amigos y es consciente de las dificultades de esa época, sin embargo, atesora bonitos momentos. Recuerda los deliciosos chicharrones, receta de doña Carmen, su abuela, y las jornadas bailando reguetón con sus hermanos menores, Davis Jean Paul y Miguel Ángel. “es necesario afrontar las adversidades. Sí, fue duro, pero en mi parecer, solo se trataba de vivir. Debíamos rebuscar y ya”, reflexiona.
Por entonces tenía apenas ocho; sin embargo, desde los tres se imaginaba actuando en la pantalla chica. “¿Cómo puedo meterme en el televisor?”, interrogó a Carmen. Disfrutaba de las novelas de Marlon Moreno; lo admira por su tesón y por mostrarse humilde en las entrevistas. “así como él pudo salir adelante, otras personas también”, resalta.
Por un tiempo sobrevivieron vendiendo combinados (arroz, fríjol y huevo), y luego, doña Carmen consiguió empleo de aseadora. De camino al trabajo se hallaba la escuela de actores Naar Landaeta. A diario Michael le llevaba el almuerzo, y al pasar frente a la institución, revivía el anhelo de vestir la piel de distintos personajes. “ahí está mi sueño”, decía. En una ocasión no se aguantó y preguntó cuánto costaba el curso. Quedó “choteado” de la tristeza, Porque no podía pagarlo.
Una tarde caminaba por allí y una profesora lo llamo. Lo invitó a asistir un día, así comprobaría si en realidad le gustaba. Michael fue y lo corroboró. Los maestros se sorprendieron con sus ganas de estudiar y le dieron una beca. Semanas después, ya había hecho de extra en la cinta Que viva la música, del director Carlos Moreno.
CON LICENCIA PARA SOÑAR
Acude a clases cada sábado, y de lunes a viernes va al colegio y colabora con los quehaceres. En su hogar es obligación de todos ayudar. “Nos toca, el asunto es crítico. Les enseño a ser hombres de bien. Si algún día no obtiene un papel en una producción, puede comprar harina, papa, carne y hacer empanadas”, explica Carmen.
A pesar de los obstáculos, la vida le ha sonreído y le ha brindado la oportunidad de incursionar en teatro, cine y televisión. Estelarizó el cortometraje Bajo el sol de la esperanza, protagonizará la obra El principito, en Cali, y en la actualidad encarna a Nicolás Holguín en El tesoro. Le gusta mirarse en pantalla, así confirma que su esfuerzo a dado frutos. A sus escasos doce años ha compartido set con grandes artistas, de los cuales aprende y recibe consejos.
Además de actuar, ha hecho realidad diferentes anhelos (darle una casa a sus hermanos, por ejemplo), más quedan muchos por cumplir. Uno de ellos es fortalecer su carrera y ser reconocido, no por la fama, si no porque le da la posibilidad de continuar apoyando a los seres queridos.
Aparte, desea convertirse en administrador de empresas o profesor de matemáticas, tener una finca con animales, conocer el mar y, el más importante, impulsar a sus hermanitos a cumplir los suyos.
Medio: Revista 15 Minutos
Texto: Diana Cristina Carvajal
Fotos: Andrés Rodríguez